Octavo día de Novena

Hoy el personaje es nuestra Madre Encarnación y el Santo Hermano Pedro, la reflexión nos recuerda cuan importante fue el misterio de belén para ellos, para el hermano Pedro, ese enamoramiento del niño Jesús por el que por estas fechas adornaba la familia de Nazareth en su sombrero, y nuestra Madre Encarnación que también enamorada, se fijó en el sufrimiento del niño al que nadie quiso recibir y por lo que tuvo que quedarse en un pesebre, en el lugar donde se alojaban los animales.

Nuestra Madre encarnación miró ese dolor y por eso nuestro Señor la escogió para reparar los dolores de su corazón, es por eso que nosotros como Bethlemitas también estamos llamados a reparar el dolor que sufre Jesús hoy en los demás.

Un agradecimiento especial a nuestros docentes no titulares por la organización de este día.